Hace ya 15 años que el cocinero brasileño Sandro Silva y su esposa asturiana Marta Seco abrían El Paraguas en la calle de Jorge Juan, de la que no se decía aún mucho eso de la milla de oro. Lugar por excelencia para los amantes de las cosas bien hechas, donde la cercanía y el mimo en todos los detalles marcan la diferencia. En su cocina honesta y con tradición son muchos los platos que ya forman parte de la lista de clásicos de la capital. No pueden faltar nunca en tu comanda además las verdinas con perdiz, las colmenillas rellenas de foie y ahora en verano, que apetece algo más fresquito, es imprescindible su gazpacho tradicional acompañado con bogavante. Un plato perfectos para degustar estos días calurosos.