En su segundo día, diríjase a Belém para visitar el Monasterio de los Jerónimos y la Torre de Belém, ambos declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Después, tome un tren a Sintra, una ciudad cercana conocida por sus impresionantes palacios y jardines. Visite el Palacio Nacional de Sintra y el Palacio da Pena, y disfrute de las vistas desde el Mirador da Vigia. Regrese a Lisboa para cenar en uno de los muchos restaurantes de mariscos de la ciudad.