Cadena perpetua es una película de 1994 dirigida por Frank Darabont y protagonizada por Tim Robbins y Morgan Freeman. Ambientada en una prisión, la historia sigue a un hombre condenado injustamente por el asesinato de su esposa. Con una trama emocionante y giros inesperados, Cadena perpetua es considerada una de las mejores películas del género de drama carcelario.