En la final de la Liga de Campeones 2014 entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid, Cristiano Ronaldo anotó un gol de cabeza en el tiempo extra. Después de un centro preciso desde la banda, Ronaldo se elevó por encima de la defensa y conectó un cabezazo imparable que aseguró la victoria para el Real Madrid. Fue un gol crucial que ayudó al equipo a ganar su décima Copa de Europa.